viernes, 31 de agosto de 2012

CÁSTULO EN "LA AVENTURA DE LA HISTORIA"


Cástulo aflora su esplendor
31 agosto 2012












Encontrado en la antigua ciudad romana un mosaico del Alto Imperio oculto durante veinte siglos y conservado, en perfecto estado, bajo una capa de ceniza

Veinte siglos ha estado este mosaico enterrado en el yacimiento de Cástulo (Linares, Jaén). La directora de las excavaciones, Concepción Choclán, presentó ayer el descubrimiento, una obra en perfecto estado de conservación que llama la atención por su colorido. Fechado entre finales del siglo I y principios del II, el mosaico fue elaborado conteselas de piedra y pasta de vidrio de pequeño tamaño, rojas, amarillas, verdes y azules, similares a las utilizadas, entre otros, en los de Pompeya.
El mosaico ha aparecido bajo una capa de ceniza. Originariamente, cubrió el suelo de una habitación cuadrada de unos doce metros por doce, de un edificio del que aún no se ha concretado su uso, aunque se piensa que fue público. La parte central relata dos mitos clásicos: el del juicio de Paris, por el que comenzó la guerra de Troya; y el mito de Selene y Endimión, pastor del que se enamoró y que cayó en un profundo sueño del que solo despertaba para ella. Las escenas están perfiladas con gran realismo y recuerdan, según sus descubridores, a las obras musevarias encontradas en Sicilia y el Norte de África.

Recreación de la Cástulo romana.
En las cuatro esquinas del mosaico se representan sendas alegorías de las cuatro estaciones. Y en sus rombos curvos, “animales de garra” (que en los romanos legitimaban el poder) como una tigresa, una leona y un león, y“animales de pezuña” (que unen a la tierra), entre los que se pueden ver un jabalí, un venado y un caballo o una yegua.
La ciudad ibero-romana de Cástulo, el mayor núcleo de población de la Oretania íbera, ocupa una situación estratégica en la cabecera del valle del Guadalquivir. Tuvo un especial protagonismo en la Segunda Guerra Púnica y fue un importante nudo de comunicación con un acceso privilegiado a los recursos mineros de Sierra Morena, convirtiéndose en municipio romano con capacidad de acuñar moneda y a sede episcopal en la época bajo imperial.

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